La Asociación de Gestores Culturales de Andalucía (GECA) pide al nuevo gobierno de la Junta de Andalucía un compromiso firme con la Cultura. Desde la Asociación, que representa a más de 300 profesionales del sector en las ocho provincias, se considera de vital importancia que en el nuevo organigrama de la Junta se contemple una Consejería de Cultura con competencias exclusivas en esta materia. “No tendría sentido dar un paso atrás y que Cultura pasara a ser un apéndice de una Consejería compartida con Turismo, Educación o cualquier otro departamento”, comentan desde la Junta Directiva de GECA.
La asociación profesional, fundada en 1998 ha exigido en numerosas ocasiones a la Junta de Andalucía y al resto de instituciones públicas, que incluya en las relaciones de puestos de trabajo de la administración autonómica la figura del gestor cultural y tenga en cuenta el Grado universitario en Gestión Cultural que se imparte en las Universidades de Huelva y Córdoba, como una vía de acceso a estas plazas.
GECA confía en que en el presupuesto que el nuevo gobierno tramite en los próximos meses se tenga en cuenta el peso específico de la Cultura en Andalucía y se mantenga el compromiso con el sector, que en los últimos años celebró un aumento global del 38,79% en las partidas dedicadas a ayudas.
Asimismo, desde la asociación profesional se confía en que el recién elegido Parlamento de Andalucía pueda continuar con la puesta en marcha de las Leyes de Artes Escénicas y de Reforma de la Ley de Patrimonio Histórico Andaluz, que tras la disolución de la cámara autonómica para la convocatoria de elecciones decayeron en su tramitación.
El pasado 15 de noviembre, durante la campaña electoral, GECA organizó en colaboración a la Asociación de la Prensa de Sevilla, un debate en el que participaron representantes de PSOE-A, PP andaluz, C’s Andalucía y Adelante Andalucía. Los cuatro candidatos se comprometieron durante el mismo a garantizar la interlocución de todos los grupos políticos con los profesionales de la Cultura. La Asociación manifiesta su disposición a colaborar tanto con el nuevo ejecutivo como con los grupos parlamentarios en toda acción que redunde en la mejora de las condiciones de los profesionales de la Cultura y se considera que se debe profundizar en la implantación de herramientas de participación como un Consejo Andaluz de la Cultura.